De lo pequeño a lo grande. De lo parcial a lo total… Para mi, la boda de Carol y Souca supuso en mi carrera como fotógrafo de bodas ver el choque y la unión de dos placas tectónicas del Este y el Oeste. Desde Valencia, Souca, siempre con esa sonrisa ¡atornillada en su cara!, desde Cáceres, la dulzura y delicadeza de Carol. Cuando a esto se unen las ganas de pasarlo bien de los diferentes lugares del país, pues surgen fiestas que más que fiestas son festivales.
Familia y amigos, el 10 de octubre fue un día en el que pudimos ver nubes, lluvia, sol, viento… hasta dejar una noche rasa y apacible. Espero que hayamos sabido recoger cada momento de vuestro día (los preparativos de Souca los disparó mi friend Víctor Matilla).
Una amenaza… ¡Valencia también fue nuestra!